¿Cómo lo hacemos?
Para cada competencia y subcompetencia se define las principales conductas observables a trabajar, ya sea para:
Reforzarla, eliminarlas, minimizarlas, modificarlas o adquirirlas.
Y una vez seleccionadas, inciamos el análisis de las herramientas que nos apoyarán y conectarán el "saber" con el "hacer", es decir seleccionamos el mejor método o modelo que pueda ser usado e implementado por el participante para apoyar el "cómo", "con qué", "cuándo","dónde", "con quién" y "para qué" de su conducta esperada.
Para posteriormente diseñar cada una de las experiencias de aprendizaje (una por conducta) que desarrollaran las dinámicas vivenciales y experimentales para conocer, usar y validar su herramienta correspondiente.
Utilizando un modelo psicopedagógico propio que garantiza que el participante lo aplique lo aprendido, ya que lo llevaremos por un cliclo que reflexiona, analiza y valida los beneficios de utilizar lo aprendido en las diversas actividades de su presente y futuro inmediato.
¿En qué somos diferentes?
Diseñamos a partir de las conductas en las que se quiere trabajar,
•Las Experiencias de Aprendizaje son parte de un ciclo conductor del proceso de cambio,
•Manejamos una fase inicial al curso-taller para establecer un contexto adecuado.
•El aprendizaje es inducido y construido por cada participante a través de la reflexión del proceso del desarrollo de la experiencia de aprendizaje.
•La teoría va de la mano con la experiencia, se encuentra internamente en la dinámica a desarrollar.
•Para cada desempeño requerido se utiliza desde el curso una herramienta de aplicabilidad, que permite conectar la teoría con la práctica común diaria.
•Podemos desarrollarle un Paquete Educativo que integre el Curso-Taller para la implementación e impartición por sus instructores internos.
•Medimos el impacto y resultados de la aplicabilidad del proyecto de formación, estableciendo económicamente el retorno de inversión.
•Creamos una página en Internet llamada “Comunidad de Aprendizaje Virtual” para manejar un aprendizaje continuo de la comunidad de participantes.
•El modelo psicopedagógico ha generado casos de éxito en la aplicabilidad de las herramientas y conceptos aprendidos por los participantes, haciendo rentable la inversión y costo del proyecto.
¿Porqué trabajar juntos?
Aportar nuevas herramientas* a los participantes para mejorar y facilitar su trabajo diario,
•Motivar acciones de cambio de conducta derivadas del valor que aporta el cambio ejemplificado en las experiencias de aprendizaje de los cursos-taller,
•Obtener un retorno de inversión, medido económicamente, en base al impacto en el modelo de trabajo de los participantes en el proyecto,
•Desarrollar y ejecutar un programa de formación diseñado a partir de las conductas esperadas y requeridas (desempeños).
•Ligar el programa de administración por competencias a la formación en base a talleres que trabajen dichas competencias,
•Facilitar el proceso de cambio a través de múltiples herramientas de enseñanza y aprendizaje.
•Centralizar la información del proyecto de formación a través de una comunidad de aprendizaje virtual (página web).